Constatamos que, una vez más, se hace patente la inoperatividad, estulticia y dejadez de este Comité de Empresa, que sigue al servicio espurio de una Consejería de Educación que reduce jornadas y retribuciones, como demuestra la condición de las secciones sindicales amarillas de la presidencia y de las organizaciones que la sostienen.
Después de que la Dirección General de Recursos Humanos (DGRRHH) nos hiciera llegar unos listados de las modificaciones para el próximo curso, lo único que se les ocurre hacer, a los timoratos y desvergonzados responsables del citado Comité de Empresa, es mandar un correo electrónico con el siguiente tenor:
“Nuestra intención es que si para el martes tenemos una propuesta conjunta de modificación para el Concurso de Adjudicación de Vacantes, se la hagamos llegar.
Para ello utilizaremos este medio, el correo electrónico, para poder estar todos informados al momento y acordar su presentación.”
Lo que deberían haber hecho de inmediato, sin caer en el rufianismo, es solicitar de Recursos Humanos una reunión urgente para NEGOCIAR la provisión y concurso de profesores de religión, tal y como ha hecho la DGRRHH, previamente, con las delegaciones diocesanas de enseñanza. Vergüenza.
No son capaces de convocar una reunión extraordinaria del Comité de Empresa, en la que tratar y converger posturas, si tuvieran alguna. Los intercambios de correos no pueden ser el medio para adoptar acuerdos de un órgano colegiado.
Hasta la fecha no han propuesto absolutamente NADA, y pretenden que les mandemos nuestras propuestas para, presumiblemente, utilizarlas de forma torticera, pues de manera reiterada nos demuestran que no son dignos de confianza alguna. De hecho, estamos en los tribunales por esas y otras cuestiones.
En cualquier caso, solo intentan lavar la cara, para no salir retratados como lo hicieron el curso pasado, sobre esta misma cuestión, en una sentencia del TSJ de Madrid (sentencia 674/2016), donde en el Hecho Probado Quinto, quedó acreditado que la Presidencia y Secretaría del Comité de Empresa, no habían hecho absolutamente nada por los profesores de religión. Dice así la sentencia:
“Previamente, en 5 de mayo, se había reiterado correo electrónico al Comité de Religión indicando que aunque finalizado el plazo para realizar alegaciones sin haber recibido ninguna comunicación del Comité, solicitaba se informase si iban a realizar algún tipo de propuesta a la citada Resolución por parte del mismo”.
Ni siquiera fue convocado un Pleno. Esto son los datos…
¡Os seguiremos informando!
USIT-EP
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