En una declaración difundida en Roma, el cardenal Oscar Rodríguez Maradiaga, presidente de Cáritas Internationalis, ha alertado del grave riesgo de crisis humana a la que se enfrenta la población civil de Gaza si la intervención militar israelí no es detenida por la comunidad internacional. El purpurado ha advertido, también, sobre la urgente necesidad de ayudar a las organizaciones humanitarias a socorrer a los enfermos y heridos en Gaza, sobre todo a las mujeres y los niños.
“Cáritas y las organizaciones de la Iglesia católica en Tierra Santa –ha afirmado el cardenal Rodríguez Maradiaga— pedimos un alto el fuego inmediato que permita atender a los heridos y enfermos. Muchas personas inocentes están sufriendo porque las organizaciones de ayuda no pueden llegar hasta ellos a causa de la intervención millar israelí”. “Desde Cáritas –ha añadido— hacemos un llamamiento a los Estados Unidos, a la Unión Europea y a la comunidad internacional para que ejerzan toda su presión a fin de lograr el alto el fuego inmediato en Gaza que propicie las condiciones necesarias para que las agencias humanitarias puedan socorrer a los heridos”.
“La guerra no puede ser justificada ni por Israel ni por Hamás” ha asegurado el presidente de Cáritas Internationalis, además de recordar que “cualquier argumento sobre proporcionalidad es moralmente repugnante cuando estamos hablando de la vida de niños inocentes”.
Colapso de los servicio médicos de Cáritas en Gaza
Cáritas Jerusalén ha denunciado, por su parte, la imposibilidad de que, dadas las condiciones de inseguridad imperantes en Gaza, su personal médico no puede llegar hasta los centros de salud que Cáritas tiene distribuidos en toda la Franja ni atender a los heridos en sus domicilios. Los ataques tampoco permiten distribuir ayuda humanitaria a la población civil.
La secretaria general de Cáritas Jerusalén, Claudette Habesch, ha declarado que “nuestro personal en Gaza está asistiendo impotente al colapso de nuestros servicios médicos, mientras que los heridos agonizan en sus casas porque no pueden recibir tratamiento”. Junto a un centro médico de referencia ubicado en el campo de Al Shati, en la ciudad de Gaza, Cáritas Jerusalén dispone de seis dispensarios en diversas zonas de la Franja.
“Aunque en Gaza existen 2.053 camas hospitalarias –explica Habesch--, los heridos a causa de los bombardeos israelíes ascienden a 2.500. Y los médicos nos están diciendo que carecen de suministros básicos, como vendas y antisépticos”. Cabe recordar que la actual crisis bélica tiene lugar tras 18 meses de férreo bloqueo de Gaza por parte de Israel, que ha provocado una grave escasez de medicinas y otros productos básicos en la Franja.
Actualmente la única vía de acceso a Gaza es el paso de Kerem Shalom, incapaz de canalizar toda la ayuda humanitaria que se necesita en estos momentos. Por este paso solamente pueden cruzar cada día entre 100 y 150 camiones, mientras que haría falta al menos 400 convoyes para cubrir las necesidades mínimas diarias. Por ese motivo, Cáritas Jerusalén ha exigido la reapertura inmediata de los pasos de Karni y Nahal Oz.
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